Mail de mi tía Elda que volvió a no atender el teléfono:
Querido sobrino, continúa mi depresión pos mundial, sobre todo cuando los escucho a varios de ustedes, los periodistas, insistir en buscar el mejor gol, el mejor arquero, el mejor referí, la mejor mar en coche. No entiendo cuál es la necesidad de que haya siempre alguien mejor que todos los demás. Sabemos que eso depende del gusto y la apreciación de cada quién y que por lo tanto nunca va a existir nadie mejor que el resto de la humanidad en ningún área. Puede haber un campeón del mundo, uno que haya ganado más títulos, un ganador del Nobel, el más goleador de la historia. Eso puede haber, pero el mejor, eso es algo tan subjetivo que todos esos periodistas que insisten en buscarlo, en el fondo están vendiendo algo.
No entiendo qué les cuesta decir “el que más me gusta a mí es fulano de tal”. No, tienen que pontificar y exagerar todo. Encima le meten el “sin dudas”. “Sin dudas el mejor del mundial fue Mengano”. Cuánta soberbia, sobrino. Haríamos un avance muy grande en las relaciones humanas si separáramos lo que nos gusta y dijéramos, por ejemplo, “a mí no me gusta pero reconozco que tal o cual es bueno”. Eso sería modestia, humildad, reconocimiento a que el gusto ajeno también vale.
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Para colaborar con lo que digo te mando un listadito de cosas que no me gustan y me parecen buenas y de cosas que me gustan y creo que son de baja calidad:
Primero las que no me gustan y creo que son buenas:
Los Rolling Stones. Iron Maiden. Los yanquis. Los chinos. Mirta Legrand. La camerata Bariloche. Capusoto. Cristiano Ronaldo. Picasso. Las carteras de Dolce & Gabbana. El sushi. El caviar negro. El champán. Iván de Pineda. Los Boy Scouts. El Real Madrid. El presidente de Chile. Bielsa. La misa criolla.
Y ahora algunas cosas que me gustan y reconozco que no son muy buenas o muy lindas:
Las hamburguesas de Mc Donalds. Pimpinela. El Fiat 128. Los caramelos media hora. Falcioni (te pido disculpas sobrino, me gusta Falcioni). El vino torrontés con soda. El bizcochuelo con dulce de ciruela. Los programas de chimentos. Rocky IV. La chica de la boutique. La carne picada.
Bueno, sobrino, creo que he dado una pequeña colaboración para un mundo más tolerante. Ojalá muchos sean capaces de decir esto no me gusta aunque sé que es bueno.
Esta columna fue publicada en el programa Córdoba al Cuadrado de Radio Suquía – FM 96.5 – Córdoba – Argentina.