Todo lo que hace Lilita Carrió tiene repercusión. La gente se acostumbró a sus denuncias y ahora cada uno de sus pasos es observado con mucha atención. En el vuelo que la trajo de regreso de Nueva York, fue el foco de todas las miradas. Le sacan fotos y las suben las redes sociales.
Pero también, los medios hablaron de su vestido hindú de color naranja furioso y de las sandalias que usó para viajar cómoda. Comentaron todo lo que despertó su presencia en el vuelo.
Carrió se ubicó en clase turista y tuvo un viaje normal. La aliada de Cambiemos recibió elogios y felicitaciones y no fue tanto por su atuendo, que estaba más acorde al verano del hemisferio norte que al otoño sudamericano .
"Me puedo sacar una foto con vos. Mi mamá te ama", le dijo una pasajera que le pidió sacarse una selfie, antes que se ubique en el asiento de la fila 21. Sin embargo, a otros no les gustó la presencia de la legisladora. “Yo la mataría a esta gorda", dijo una pasajera, según publicó el diario Clarín.