Después del anuncio del presidente sobre las medidas de emergencia para enfrentar el coronavirus, la vicepresidenta, Cristina Kirchner, tomó esta madrugada un avión rumbo a Cuba para visitar nuevamente a su hija Florencia, quien se encuentra realizando un tratamiento médico en esta isla.
Por esta razón, Cristina no pudo estar en el encuentro que se llevó a cabo el domingo en la residencia de Olivos, donde Alberto Fernández reunió a sus ministros y a un equipo de expertos en la materia para terminar de definir los anuncios para enfrentar el coronavirus.
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La actual titular del Senado regresaría al país el próximo 22 de marzo, cuando todavía estará vigente la prohibición de ingreso de extranjeros y los aeropuertos estarían recibiendo solamente a los argentinos que serán repatriados.
Cabe destacar que en Cuba las acciones de prevención para combatir el coronavirus son más leves que en el resto del mundo ya que solo hay cuatro casos confirmados y 90 extranjeros aislados y las autoridades llevan adelante un refuerzo de los cuidados sanitarios, pero sin cerrar sus fronteras al turismo internacional.
Al igual que lo hizo en ocasiones anteriores, Cristina pidió un permiso a la Justicia para viajar a visitar a su hija, que sigue internada y haciendo un tratamiento médico como consecuencia de un estrés postraumático y un linfedema en las piernas.