Como en efecto dominó están cayendo los gobiernos civiles que mantenían buenas relaciones con Europa. Los vicios de Francia y la mano oculta de Rusia entre las causas.
Desde la rebelión del Grupo Wagner, ocurrida dos meses antes, el creador y dueño del ejército de mercenarios protagonizaba la crónica de una muerte anunciada. Al presidente de Rusia no le importa ser visto como un asesino serial, sino ser temido.
Yevgeny Prigozhin, jefe del ejército mercenario, viajaba en el avión privado Embraer que se estrelló en la región de Tver. Otros nueve pasajeros también fallecieron.
Moscú impulsa los golpes de Estado que están instalando en África dictaduras militares pro-rusas y anti europeas. Burkina Faso y Mali amenazaron a los países del Oeste africano con lanzar una guerra contra ellos si invaden Níger para atacar a los golpistas. Sería un conflicto indirecto entre el Kremlin y la alianza atlántica.
No se sabe dónde está Yevgueni Prigozhin, pero la revelación de que, junto a los comandantes del Grupo Wagner, estuvo reunido con Putin en el mismísimo Kremlin, vuelve más inquietante y oscura la crisis de poder que sacude a Rusia.
La razón por la que Yevgueny Prigozhin pasó del avance conquistador hacia Moscú a volver sobre sus pasos de manera vergonzosa y desaparecer del escenario político-militar, es un misterio. Pero lo ocurrido dejó a la vista el caos que impera en el gobierno ruso.