Londres vuelve a vivir un momento trágico a días del atentado que dejó siete muertos y otro medio centenar resultó herido. En la madrugada de la capital británica, un voraz incendio se desató en la Grenfell Tower, un edificio residencial de 27 pisos.
Hay 17 muertos y al menos 50 personas heridas, de acuerdo a lo que informó la Policía. Aún hay familias atrapadas, pero por el tamaño y la complejidad del edificio, se desconoce si están con vida, inconscientes o muertas. Aún el fuego no se extinguió y en el lugar trabajan más de 200 bomberos. Hay peligro de desmoronamiento.
Vecinos que presenciaron cómo las llamas envolvían toda la construcción, relataron que vieron a varias personas atrapadas en la torre y que, ante la desesperación, escaparon con sábanas que ataban a los balcones. La gente corría despavorida para salvar su vida. Otras familias, lanzaron a sus hijos en frazadas para que no murieran quemados. Hay muchos niños internados graves en los hospitales.
Las autoridades descartaron que se tratara de un atentado. Según trascendió, el incendio comenzó en el cuarto piso donde un motor de una heladera habría explotado y eso provocó que el fuego se propagara a otras partes del edificio y se generara una columna de humo.
"Las alarmas contra incendio nunca sonaron", reportó uno de los sobrevivientes. Además, se conoció que hubo problemas en las salidas de emergencia. Video:
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