Este miércoles se desarrolló la primera jornada de alegatos luego de las 13 audiencias de declaraciones por el crimen de Fernando Báez Sosa.
Los fiscales Gustavo García y Juan Manuel Dávila pidieron prisión perpetua para los ochos rugbiers acusados del asesinato. “Estuvieron siete minutos en ese lugar, durante ese tiempo acordaron matar a Fernando del modo que lo hicieron”, indicó el primero de ellos. Ambos detallaron cuál fue el rol de cada uno de los imputados durante la golpiza.
Luego fue el turno de Fernando Burlando, abogado de la familia de la víctima, quien antes de entrar a la sala anticipó que coincidiría con la fiscalía en el pedido de perpetua.
"Levanta la mano, pide clemencia y la respuesta fue una patada a la cabeza, y otra más, otra más. Era una bolsa de papas. Y seguían golpeándolo", dijo Burlando, quien agregó que el joven de 18 años "fue fusilado a golpes y patadas".
Detalló que los rugbiers esperaron la ausencia de policías en la cuadra para emboscar a Báez Sosa. "La imagen de Fernando Báez Sosa en el suelo pidiendo clemencia es la imagen que justifica el pedido de prisión perpetua para los acusados. Esa imagen resume los motivos y los porqué", siguió.
Los acusados jamás miraron a la querella alegando. Burlando agregó en su discurso: "¿Cabe alguna duda a esta altura del debate si hubo o no intención de matar? ¿Se puede hablar de una pelea? ¿Nunca fue amenazado? ¿Nunca fue emboscado?. Eran cazadores y querían el trofeo".
Continuando esta teoría de cazadores, señaló que "Máximo Thomsen era el líder de la manada". Y detalló el accionar de los rugbiers. "Lo cercaron para que no pueda recibir ayuda. Hicieron inteligencia previa para localizar a la víctima fuera del localbailable. La orden la dio Ayrton Viollaz", dijo primero, y después agregó: "Enzo Comelli, Ciro Pertossi y Máximo Thomsen fueron hacia el objetivo. Es un círculo que cierra perfectamente".
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"El trofeo que se llevaron fue la vida de Fernando. Ciro Pertossi ni se esforzó en darle la patada. Después vinieron los festejos. Uno normaliza estas situaciones. Ellos sabían que habían matado a un joven, y en algún momento tuvieron la idea de volver a buscar a los amigos de Fernando para ajusticiarlos", apuntó el letrado.
Y añadió sobre la golpiza fatal: "Esta voraz carnicería se extendió por 50 segundos aproximadamente, ese fue el tiempo que les demandó a los asesinos matar a golpes a Fernando”.