El 12 de enero de 2006 hubo un robo comando a un banco, con disparos y el robo de un importante botín. Pero este asalto en el banco Nación de Unquillo con un botín de $180.000 quedó totalmente opacado por un episodio que horas después alcanzó las primeras planas de medios de todo el país y del mundo: el hoy llamado Robo del Siglo.
Sus integrantes fueron una banda integrada por gente de variados antecedentes y profesiones. Algunos, ladrones con frondosos antecedentes, otros especialistas en cuestiones técnicas y artistas y hasta algún delincuente de guante blanco.
Durante un año estudiaron los movimientos del Banco Río (hoy Santander) en la localidad de Acasusso, en el partido de San Isidro, en el norte del gran Buenos Aires y se imaginaron un sofisticado plan para robar las cajas de seguridad.
+ MIRÁ MÁS: Todos los Tesoros del Archivo de El Doce
El día del atraco, varios integrantes de la banda entraron al local poco después del mediodía, algunos de ellos disfrazados, y montaron una toma con rehenes. En realidad estaban disimulando entretantos terminaban el túnel que conducía al banco y saqueaban 143 cofres.
Mientras sostenían la fachada del secuestro y negociaban con la policía, iban liberando lentamente a los rehenes y avanzaban con la violación de las cajas.
+ VIDEO: El robo del siglo en Los Tesoros del Archivo:
Finalmente escaparon por el boquete y dejaron una bomba falsa que demoró la persecución. La excavación conducía a un arroyo subterráneo donde los esperaban dos botes en los que cargaron el botín. Desde allí se trasladaron hasta 17 cuadras del lugar, donde los esperaba un vehículo conectado a una tapa de desagüe.
Cuando la policía entró se encontró con el famoso cartel que dejaron los ladrones: “En barrio de ricachones, sin armas ni rencores, es solo plata y no amores”.
Se cree que robaron entre 19 y 25 millones de dólares, de los que sólo se recuperó uno.
Se trata de una historia propia de la ficción que finalmente tuvo su correlato en el cine con un film protagonizada por Guillermo Francella y Diego Peretti.
Un mes después del robo la expareja de uno de los autores lo denunció e hizo caer a parte de la banda.
Cinco de los acusados fueron juzgados y condenados a penas de hasta 15 años de prisión, que luego fueron reducidas. A los 10 años todos los condenados ya estaban en libertad. Otros dos presuntos integrantes nunca fueron identificados ni juzgados. Si hoy se dieran a conocer sus nombres, no podrían ser llevados a la justicia porque el delito ya prescribió.
Pasados los años todos se muestran “reinventados”: Vitette Sellanes escribió un libro y atiende su joyería en Uruguay (dice que no vende nada ilegal ni obtenido en el robo), García Bolster volvió a su taller de motos. Otro, De la Torre, es actor (incluso hizo un bolo en la película del robo) y Araujo, artista plástico y profesor de artes marciales y presunto cerebro detrás del robo, participó del guión de la exitosa película y actuó en el documental.
Todos andan ya por sus 60 o 70 años y aseguran haber dejado el mundo del delito atrás. Zalloechevarría, el integrante de la banda que se recibió de abogado, dijo que cometer ese robo fue como haber “jugado y ganado un mundial de la delincuencia”.
El Doce tiene un valioso archivo audiovisual con imágenes desde el año 1965. Si querés consultar por imágenes, escribinos al Whatsapp al 549351 2191212 o al mail archivoC12@artear.com